Chevrolet

 

 

Chevrolet Corvette de Bburago. De la nefasta colección Disney, la miniatura está reducida en detalles a la máxima expresión, se pueden contar con los dedos de una mano las piezas que tiene, las famosas ruedas de botón, puertas sin apertura y decoración con imágenes Disney, más parece un juguete infantil. Al final con tanto reducir costes estos de Bburago acabarán sin incluir interiores.
Chevrolet Corvette de 1978 de Ixo. El molde es muy resultón y replica bien los volúmenes y formas de este bonito "muscle-car", aunque no se nota mucho las dos aguas de las puertas y los soportes de la matrícula delantera no sobresalen del frontal. La pintura le sienta bien y está en su medida justa. En las luces traseras han omitido los indicadores dentro de las tulipas, y los indicadores laterales son muy irreales. Sin embargo las ruedas le quedan de lujo. Los interiores, en negro y calcas para los indicadores y consola central.
Chevrolet Corvette de 1967 de NewRay. No tiene un mal molde, pero como sucede en casi todos los modelos dela marca, lo mata esos cromados y esas ruedas tan irreales. Lo que me asombra de esta marca en la variedad de colores en sus modelos y lo bien aplicadas que están: de tal forma que se aprecian perfectamente todos los detalles en la carrocería (Ixo, aprende) Otro buen detalle es la tampografía, muy delicada anto la del capó como el trasero.
Chevrolet Tahoe de Cararama. Modelo mastodóntico que apenas si cabe en la caja. Detalles por doquier; molduras laterales, baca con barra portaobjetos, luces en plástico, paragolpes y rejilla cromados... El interior, aún estando sin pintar, es de magnífica factura, con sus siete plazas,  toques de pintura  le hacen ganar bastante, además tiene un calca para simular el cuadro, así como otra en el volante.
Chevrolet Corvette Z-51 de Ixo para Altaya. Otra miniatura donde parece que los chinos se han esmerado bastante. Molde correcto donde se ha aplicado una capa correcta de pintura que no tapa ningún detalle ( cosa rara ) Las ruedas me gustan mucho, llantas cromadas donde a través de ellas se pueden ve los discos de freno perforados. El interior está muy bien resuelto, bicolor, con calcas para simular los diferentes mandos, incluso el navegador. El peor detalle de la miniatura son unos limpias grabados en la luna que desentonan muchísimo en la calidad general del modelo.

 

 

 



 



Chema-2007